Análisis – Sonic Mania (Nintendo Switch). El retorno de los cielos azules por la puerta grande

Tras la dupla de juegos formados por Sonic 3 y Sonic & Knuckles, Yuji Naka se bajo del barco donde se creaban los sueños juegos del erizo azul. El desarrollo de nuevos títulos quedó en manos de la rama americana del SEGA Technical Institute, a quienes les tocó el marrón de hacer el siguiente juego de Sonic y desde luego las expectativas no eran precisamente bajas dado al la tendencia de que, hasta la fecha, cada cual había sido mejor que el anterior.

 

Con la llegada de Sega Saturn y las tres dimensiones, el que debía de haber sido la siguiente entrega principal de Sonic, Sonic Xtreme, terminó siendo cancelado tras varios prototipos distintos. ¿Y a qué viene esta miniclase de historia? Pues básicamente para decir que hemos tenido que esperar dos décadas para ver la verdadera continuación de los títulos de Mega-Drive bajo el nombre de Sonic Mania. ¿Cómo dices? No, por Sonic the Hedgehog 4 no me viene nada a la memoria.

 

 

You Can Do Anything

Tras los acontecimientos de Sonic 3 & Knuckles, el trío protagonista se encuentra disfrutando de unas merecidas vacaciones cuando Tails detecta una enorme fuente de energía. Dado que no se trata de ninguna de las Chaos Emerald o la Master Emerald, Tails desempolva el Tornado y corren a ver el origen de esa señal. Por desgracia el Doctor Robotnik Eggman se les ha adelantado y junto a su nueva flota de robots de élite, los Hard Boiled Heavies, se han apoderado de una nueva piedra preciosa conocida como “Phantom Rubi” capaz de distorsionar el espacio tiempo.

 

Esa es toda la historia de Sonic Mania, pero es que no necesita más. Tan solo es una excusa para volver a correr por esos mundos de cielos azules, mientras recibimos una soberana paliza a base de puñetazos de nostalgia. Pero es una paliza que no duele. Unos golpes que se disfrutan con una sonrisa de oreja a oreja en la cara.

 

Y es que el trio formado por Whitehead, Headcannon y PagodaWest Games tienen muy bien estudiados a las aventuras del Sonic Team primigenio a base de imitar su trabajo durante tantísimo tiempo, ya fuese con juegos fan de una calidad exquisita o encargándose de portear los juegos clásicos del erizo a distintas plataformas. Este saber hacer se traduce en un respeto absoluto por las físicas y el diseño de niveles que colocaron a los juegos originales en el Olimpo de los plataformas.

 

Sonic Mania

 

Nuevo y clásico

De las físicas no hay mucho que añadir más allá de que Sonic, Tails, Knuckles y los enemigos se comportan tal y como lo han hecho siempre. Tan solo se ha añadido un nuevo movimiento, el “Drop Dash”, que permite no perder velocidad al caer al suelo y salir disparado. Sin embargo, los escenarios sí que dan para escribir bastante más. Con todo esto del caos espacio-temporal toca revisitar zonas conocidos por todos. A pesar de que tras un primer vistazo parezca que Sonic Mania tiene más de recopilatorio que de juego nuevo al poco de andar por Green Hill Act 1, el juego se quita la máscara y nos damos cuenta que nada más lejos de la realidad.

 

Las zonas antiguas poco tienen que ver con las originales más allá del nombre y la temática, pues su nuevas estructuras y elementos las cambian al completo. Si bien es cierto que por desgracia la selección de zonas rescatadas no contentará del todo a los fans, pues cada uno tiene sus favoritas, las nuevas pueden llenar ese hueco perfectamente. Tienen el potencial para convertirse en clásicos instantáneos sin despeinarse. No creo que, si estuviesen en los juegos de los años 90, nos hubiesen desentonado en ningún momento.

 

Las zonas vuelven a estar divididas en dos actos con un mini jefe al final del primero y jefe al final del segundo. La gracia es que cada uno de estos actos es enorme. Los niveles se han ampliado tanto en vertical como en horizontal, dando lugar a decenas de caminos alternativos plagados de secretos como los anillos que nos permiten entrar en las Special Stages. Son tantas las opciones y bifurcaciones que vamos a tardar un tiempo en encontrar todos los secretos y ver cuál es la óptima para machacar las puntuaciones de nuestros amigos en el modo contrarreloj.

 

En cuanto a los niveles especiales esta vez tenemos dos. Las Bonus Stages, que se acceden al llegar a los checkpoints con 25 anillos, nos darán medallones que desbloquean contenido extra si conseguimos superar cualquiera de los 32 niveles distintos de bonus de las bolas rojas y azules de Sonic 3 & Knuckles. Las Special Stages sin embargo son otra clase de historia del erizo azul. El objetivo es perseguir a un robot que tiene una Chaos Emerald, para ello tendremos que recoger orbes azules para aumentar nuestra velocidad y anillos para aumentar el tiempo disponible, mientras esquivamos obstáculos y barrancos. La gracia es que estas fases recuerdan bastante a las Special Stages de Sonic CD, mientras que el modelo de los protagonistas desprenden cierto aire a Sonic Jam y Sonic R de Sega Saturn.

 

 

Y a nivel técnico que decir que no estéis viendo vosotros mismos. Una maravilla visual que evoluciona lo que vimos en Mega-Drive con más y mejores animaciones, más colores, más detalles y más cielos azules. El sonido es otro golpe a las tardes en las que engañábamos a nuestro hermano/primo/vecino pequeño dándole el segundo mando y diciendo que el llevaba a Tails. Los temas clásicos han sido versionados de forma magistral y al igual que con las nuevas zonas, las nuevas canciones encajarían a la perfección en cualquiera de los Sonic clásicos.

 

Sonic Mania – Fin de(l Sonic) ciclo

El título de Sonic Mania no es casualidad. La cantidad de fans que movió el erizo en los noventa es tanta que aún perduran a día de hoy a pesar de lo maltratado que está el personaje en los últimos años. Esos fans son los que mantienen vivo a Sonic, los mismos que lo han convertido en meme, pero han abrazado el meme y lo disfrutan. Esos fans son los que han logrado el mejor Sonic desde 3 & Knuckles y lo han hecho para fans.

 

Sonic Mania

 

Este análisis ha sido realizado gracias a un código del juego cedido por Sega.

Sonic Mania es el homenaje que el erizo se merecía desde hace unos cuantos años. Una clase maestra de diseño, de buen gusto; de saber cómo combinar lo viejo con lo nuevo para dar un producto que los segueros venimos reclamando desde hace años. El Sonic Ciclo se ha roto. Al menos tendremos un buen juego de Sonic en 2017.
Historia
65
Gráficos
90
Jugabilidad
90
Sonido
90
Duración
80
Nota de lectores4 Votos
97
Pros
La vuelta de Sonic a las plataformas en dos dimensiones por la puerta grande
Bastantes extras que contentarán a los fans y alargan la vida del juego
El juego se sostiene perfectamente por si solo, sin depender del "efecto nostalgia"
Contras
El duelo final puede no estar a la altura de las espectativas
El rescate de algunos personajes emblemáticos para no sacarles todo el jugo posible
Haber tenido que esperar tanto por un Sonic digno de los de Mega Drive
85