No son pocas las compañías quienes han aprovechado para recuperar algunos de los títulos que lanzaron en Wii U y volverlos a sacar en su sucesora, la nueva consola híbrida portátil y de sobremesa, para explorar esa primera faceta y que de paso el público actual pueda volver a disfrutarlos o conocerlos de primeras. Este ha sido el caso de parte del nutrido catálogo de trabajos en los que ha participado Ratalaika Games, o como el que actualmente nos ocupa, Twin Robots, una aventura de acción que mezcla puzles y plataformas además de sumergirnos en un oscuro mundo futurista donde los robots tratan de escapar de la crueldad de un sistema inflexible. Como bien se puede intuir por la coletilla Ultimate Edition, estamos ante una versión mejorada del original, quizás no tanto en su aspecto gráfico, que permanece más o menos igual, como en el contenido que ofrece. ¿Queréis conocer cuáles son esas mejoras? Entonces continuad este viaje de la mano del siguiente análisis.
La dura vida de los robots
Una exigente fábrica de robots somete a continuas pruebas a los sucesivos modelos para comprobar que son aptos para servir a los humanos en las diversas tareas encomendadas, ¿y qué pasa con aquellos otros que no cumplen con todas las expectativas o no funcionan todo lo bien que se espera de ellos? Pues que son inmediatamente destruidos y sus materiales reutilizados para fabricar otras nuevas unidades. Ese último cruel destino es el que parece que corresponder a Watt y Volt, dos robots hermanos que no desean resignarse y quieren seguir luchando por sus frágiles existencias, y quien mejor que nosotros para acompañarlos y guiarlos en su afanosa búsqueda de la ansiada libertad que nosotros mismos. Esa sencilla trama es la que sirve de excusa para introducirnos en el juego y justificar la serie de niveles que tenemos que atravesar, sin más diálogos ni más desarrollo que la escena inicial y final para meternos de lleno en la faena.
Este juego se estructura en una sucesión de fases de parecida ambientación, donde tenemos que alternar en el manejo de los dos robots protagonistas, uno negro y otro blanco para diferenciarlos. En cada nivel el proceso es el mismo, uno de los personajes está atrapado en una especie de prensa automática, y con el otro debemos explorar a toda prisa el entorno en busca de un enorme botón rojo que la detiene y abre la compuerta para que escape, una vez los dos libres, debemos ir recogiendo energía de las losetas luminosas que componen el suelo de modo que contemos con la suficiente para mantener activas nuestras respectivas baterías y para poder emplearla en abrir el cierre de la puerta que bloquea la salida. El objetivo principal por tanto es alcanzar el final de cada nivel con al menos uno de los robots, aunque por supuesto lo ideal es que ambos sobrevivan, para lograrlo también podemos transferir energía de uno a otro, a fin de asegurarnos que no se les agote la pila, aparte podemos encontrar una o más baterías de repuesto escondidas. En nuestro camino a la meta tenemos que sortear montones de peligros en forma de sierras, hojas afiladas, gas venenoso, suelo quebradizo y un largo etcétera, más que propiamente afrontar puzles complicados, es una cuestión más de habilidad y reflejos que de neuronas.
En la oscuridad de una nave industrial
Respecto al aspecto visual, no hay muchos cambios que destacar respecto al anterior, tanto los personajes como los escenarios son modelos en 3D, quizás se aprecia una excesiva oscuridad, que se puede paliar aumentando la iluminación en opciones. Se echa en falta un poco más de definición y detalle, por tratarse de un juego de Switch, y un poco más de variedad en los escenarios, un poco difuminados por cierto, aunque se puede decir que la ambientación lóbrega propia de una fábrica insensible está bastante lograda. Se echa en falta también un poco más de animación en los personajes, siquiera para darles una apariencia de un poco más de vida, o para crear un poco más de empatía hacia sus atroces circunstancias de opresión, por lo demás están bien hechos, sencillotes de aspecto, pero bonitos. Como detalle visual curioso, algunas de las trampas, como las sierras o los pinchos aparecen manchados de “algo rojo” que se supone que no sería sangre puesto que es una fábrica de robots (o eso o no hay un control riguroso en la misma sobre los accidentes laborales).
En cuanto al apartado sonoro, destacan las melodías de estilo tecno y futurista, acompañan bien a la situación en la partida, creando esa sensación de que debemos mantenernos en marcha si no queremos que se cumpla un destino funesto. Faltaría un poco más de variedad para que no terminara haciéndose tanto el oído a los mismos acordes fase tras fase; en cuanto a efectos de sonido, son casi todo de maquinaria en marcha y una amplia selección de objetos afilados y cortantes que ponen los pelillos del cogote de punta, no obstante, tanto la música como los efectos se pueden enmudecer en su caso gracias al control de volumen.
La sencillez de un buen diseño
Los controles en Twin Robots son de lo más sencillos, el botón A para saltar, el B para tirar o empujar ciertos objetos, el X para transferir energía de nuestra batería a la del otro robot o al enchufe que aguarda al final de cada nivel y el Y para cambiar en los controles de un personaje a otro, como habilidades extra contamos con la opción de rebotar en las paredes para ganar altura y la de aferrarnos a los bordes y escalarlos. La jugabilidad en general es buena, los personajes se mueven bien, reaccionan rápido, y parecen haberse solucionado algunos fallos como la incapacidad de saltar a tiempo mientras se baja una rampa relativamente empinada, un pequeño fallo achacable al motor Unity que parece haber sido solucionado; por otro lado aparece algún otro curioso como el hecho de que si nos pegamos a la intersección de una pared con una rampa de las que resbalan, nos quedamos pegados a ese punto sin deslizarnos, aunque podemos escapar de la “trampa” con un simple salto.
El diseño de los menús es de lo más sencillo, minimalista casi, se echa en falta un poco más de detalles visuales, aunque es cuestión de gustos. Por otro lado, destaca la velocidad de carga de las fases, casi instantánea, y las partidas desarrolladas en unos fluidos 60fps incluso en modo portátil con resolución que parece de 720p, aunque es difícil de decir esto último dado el uso seguramente intencionado de fondos difuminados. No hace falta mencionar que la experiencia de juego es igual tanto si jugamos en modo portátil como conectados al dock, no hay diferencias de rendimiento apreciables en cualquiera de los dos casos.
La vida de la batería da más de sí
Uno de los principales cambios en esta Ultimate Edition es la inclusión de algunos niveles extra y una serie de logros relacionados con la manera de jugarlos, del tipo limitar el número de saltos, evitar recibir daños o lograr alcanzar la meta antes de ni siquiera liberar al otro robot. Todos ellos obligan a revisitar las zonas ya superadas y esmerarnos aún más en el transcurso de la partida, lo que en conjunto consigue que la duración de este juego se prolongue respecto a su versión original, resultando que necesitemos alrededor de cuatro o cinco horas en completarlo en su totalidad. Por supuesto hay que contar también el factor multijugador, que sin duda alarga aún más dicha duración, e incluso lo vuelve bastante rejugable si tratamos de superar récords de tiempo con algún amigo. De acuerdo con la mecánica que propone el juego, uno de los jugadores no puede desplazarse y hacer algo hasta que el otro lo libra de la prensadora, aunque se compensa con el hecho de que en cada nivel se alterna en cuál de los dos es el que está atrapado.
Respecto a modos de juego, tan sólo tenemos la aventura principal para jugarla en solitario o en cooperativo, hubiera estado bien completar la experiencia con algún otro modo batalla, desafíos especiales con los que fomentar una cooperación más profunda, o un ranking online con que picarse con gente de todas partes, y de esa manera darle aún más vidilla. También hay que tener en cuenta que por su precio está bastante bien lo que el juego ofrece en su conjunto.
Twin Robots: Ultimate Edition – Reciclarse o morir
En conclusión, Twin Robots es un modesto plataformas de acción y puzles que ofrece ideas originales y buen rato de entretenimiento en forma de retos basados en puzles sencillos; no se puede obviar la presencia de algunos fallos menores en los ángulos de la cámara, la patente oscuridad o la falta de algún modo de juego extra. Las novedades que aporta en esta versión Ultimate respecto a la original de Wii U no es que sean excesivas, pero al menos invitan a darle una segunda oportunidad además de para aprovechar el factor portátil. En definitiva, estamos ante un título al que merece la pena darle una oportunidad, especialmente recomendado para tenerlo como una buena opción de plataformas para dos jugadores.
Debe estar conectado para enviar un comentario.