El ser humano siempre se ha caracterizado por su irracional tendencia hacia lo rimbombantemente apocalíptico. Por no hablar de nuestra vocacional apuesta por la sátira y el humor negro. El problema llega cuando, por muy descabellada que sea la noticia de cabecera, no sabemos distinguir realidad de ficción. ¿A que viene tanto rollo? A un falso rumor (sinceramente no debería haber llegado ni a eso) que apuntaba a la explosión (por combustión programada) de todas las Wii en algún momento de 2023.
La noticia, procedente del portal Hard Drive, recoge unas supuestas, y surrealistas, declaraciones del presidente de Nintendo América Doug Bowser:
Debido a los cambios en los estándares de la industria del videojuego y a la disponibilidad de un mejor hardware, creemos que es mejor que todas las Wii que todavía funcionan perfectamente se incendien en algún momento del próximo año. Simplemente derritiéndose y estallando partes por toda la habitación. No queremos que, una vez lanzado Nintendo Switch Sports, nadie pueda disfrutar de una versión anterior. Estamos seguros de que lo comprendéis.
A poco que conozcamos Hard Drive, o simplemente ojeemos el resto de sus noticias, sabremos que se trata de un medio humorístico y satítico relacionado con el sector que aquí nos ocupa. No obstante, no son pocos (medios incluidos) los que han tomado dichas declaraciones como un rumor posible. Queremos creer que solo echaron un vistazo al titular y simplemente entraron en pánico.
¿Conclusión? No, la Wii no sufrirá ningún tipo de explosión. Y la vuestra, amén de algún accidente perfecta y, casi, científicamente explicable no va a estallar en mil pedazos en algún momento de 2023. Al menos no a propósito…