El ejército de Terracota es ese célebre conjunto de cientos de estatuas milenarias, creadas con ese tipo de piedra, para proteger a Qin Sin Huang, el primer emperador de China en su viaje al más allá. Este monumento histórico ha servido de inspiración para los estudios independientes, Freedom Games y Appnormals Team, para crear la aventura de acción Terracotta, que llega a la consola híbrida el 25 de mayo.
En la misma sucede que una terrible maldición ha caído sobre el ejército de guerreros eternos de la dinastía Qin, salvo uno de ellos que afortunadamente se ha librado y ahora tiene el cometido de liberar a sus compañeros de la misma. Para ello tendremos que usar nuestra habilidad mística para movernos entre los dos interconectados mundos del Ying y el Yang.
Mientras en uno todo es acción, lleno de enemigos atacándonos -nuestros antiguos compañeros guerreros poseídos por la maldición-, en el otro el tiempo fluye más despacio y nos permitirá realizar movimientos estratégicos que influyen en el otro, de modo que podamos encontrar la forma de escapar de los peligros y sortear los obstáculos que nos aguardan en forma de puzles por el camino.
Con motivo de su estreno, se ha mostrado el siguiente gameplay donde podéis ver el juego en movimiento durante sus primeros quince minutos de partida:
Gameplay Terracotta
Tráiler Terracotta
Desplázate entre los reinos del Yin y el Yang, dentro de la tumba del emperador Qin y en su otra vida, haciendo bucles entre la muerte y el más allá para superar desafíos malditos.
El Yin es el dominio de la soledad y la tranquilidad. La tumba oscura y desolada es una fortaleza, donde puedes trazar estrategias, prepararte y alterar el trazado para facilitar tu viaje.
Yang es el reino del más allá, la luz y la acción. Ejecuta estrategias de combate, esquiva enemigos y supera a los defensores de la tumba para encontrar el origen de la maldición que pesa sobre el resto de los terracota.
Eres uno de los ocho mil guerreros destinados a proteger al Emperador Qin en su otra vida. Tus compañeros no son tus enemigos, aunque no lo crean así en este momento…
Domina tu habilidad para canalizar la luz del Yin, no sólo para cambiar de reino, sino también para manipular el entorno.
Despierta antiguos mecanismos y desciende al inframundo, venciendo a los enemigos mediante la velocidad y la agilidad, en lugar de utilizar únicamente la fuerza bruta.
Derrota a nueve jefes brutales, que requieren el dominio de las nueve fases del Qi: La energía universal que forma todas las partes de los seres vivos.