Hell Warders

Análisis Hell Warders – Nintendo Switch. Sacando a nuestro estratega interior

Cómo proteger el papel higénico y la levadura en un supermercado

Fecha de lanzamiento
21 febrero, 2020
Número de Jugadores
1-2
Tamaño de la Descarga
2159,00 MB
Idiomas
Español, inglés, francés, etc.
Nuestra puntuación
45

Nintendo Switch está siendo la salvación de muchos durante esta cuarentena. La gran variedad de títulos que siguen llegando a la consola híbrida de Nintendo consiguen que mantengamos la mente distraída en estos tiempos difíciles, donde toda distracción es bien agradecida. Desde NextN, hacemos todo lo posible por seguir manteniendo la actualidad a vuestra disposición y, además, continuamos analizando los títulos más variopintos que llegan a la consola. Hell Warders es uno de estos títulos que distribuyen nuestros amigos de Meridiem Games, pero desarrollado por AntiGravity Studios. Es un port de un juego que ya llegó a otras consolas, pero que, una vez más, cuenta con el atractivo extra de tener la posibilidad de jugarlo allá donde queramos gracias a las posibilidades únicas de Nintendo Switch. ¿Estáis preparados para proteger con uñas y dientes el nexo a lo largo de más de veinte escenarios distintos?

 

https://www.youtube.com/watch?v=jXvkrsGKT80

 

El infierno se ha desatado

La historia de Hell Warders es simplona, pero cuenta con un pretexto que ayuda a hilar la jugabilidad y las mecánicas del título. A grandes rasgos, podemos resumirla así: Se ha abierto una puerta al infierno y desde allí, miles de hordas de demonios invaden la tierra. Además, han secuestrado a una princesa que debemos rescatar, ya que formamos parte de los Guardianes del Infierno (Hell Warders), la última esperanza para frenar a la amenaza demoníaca.

 

Como podéis ver, nos dan los elementos justos y necesarios para entender quienes son los malos, quienes son los buenos, contextualizar el conflicto y darnos un objetivo. Así, Hell Warders, con apenas diálogos o escenas cinematográficas, nos va presentando la historia a lo largo de diferentes localizaciones, que equivalen a los «mundos» de otros juegos. Cada una de estas localizaciones, a su vez, está dividida en cinco escenarios distintos, lo que hace de «niveles». Ahora, cuando hablemos de la jugabilidad en profundidad, es cuando la cosa se complica.

 

Hell Warders

 

La mejor defensa es un buen ataque

En cada fase, o nivel, contamos con un nexo que debemos proteger de las hordas de enemigos que aparecen. Cada nivel cuenta con diferentes oleadas de enemigos. La jugabilidad se separa en dos; entre cada oleada disponemos de una serie de recursos que nos permiten colocar diferentes unidades a lo largo del mapa, que van desde simples soldados a magos. Cada unidad tiene unas características concretas y funciona mejor frente a unos enemigos u otros pero, obviamente, las más poderosas y versátiles, consumen más recursos. Además, contamos con un límite de unidades en cada nivel, por lo que debemos pensar con calma dónde posicionar a cada una, su rango de ataque, si reforzarla o no (también consume recursos) y si es mejor tener muchas unidades más débiles o pocas y más poderosas, sobre todo al principio del nivel, donde contamos con el menor número de recursos.

 

La otra parte de la jugabilidad es el combate en sí. Podemos elegir entre 3 héroes distintos y cada uno se especializa en un tipo de combate, contando con unas habilidades concretas y únicas, que afectan directamente a nuestro estilo de juego. Por un lado contamos con un caballero, armado con su espada y escudo, que se centra en atacar cuerpo a cuerpo de forma rápida, pero no haciendo mucho daño. Contamos con un pistolero, centrado en los ataques a distancia, que ataca muy rápido, pero es bastante débil y con un guerrero con una gran maza, que resiste bastante bien los golpes y hace bastante daño, pero es algo lento. En este momento del juego, manejamos a nuestro personaje libremente por el escenario, pudiendo atacar a los enemigos y proteger a algunas de nuestras unidades (que podemos ir volviendo a posicionar o reforzar en cualquier momento, pero tardan más en aparecer durante esta parte de la jugabilidad). El nivel finaliza cuando derrotamos al último enemigo de la ultima oleada. En base a nuestra actuación, obtenemos una mejor o peor calificación, que se traduce en desbloqueables que mejoran las características de nuestro personaje, así como nuevas unidades y lo que es más importante: en moneda de cambio para mejorar nuestros atributos y los de las unidades.

 

 

Hell Warders: Ambicioso, pero no mucho

El factor estratégico, la profundidad del sistema de mejora de tu personaje y las unidades que poseemos, la rejugabilidad que ofrece al querer obtener la mejor puntuación para sacar todas las mejoras y todo lo bueno que podemos atribuir al juego, denota la gran ambición que había por parte de los desarrolladores a la hora de planificar el título. Sin embargo, Hell Warders es un título que se vuelve fácilmente repetitivo, su apartado gráfico es bastante pobre para los escenarios tan pequeños que tiene y la música es bastante plana y poco memorable. También es un juego corto, ya que superarlo no debe llevarnos más de 6 horas siendo generosos, su variedad de enemigos es aceptable (aunque nos cansamos pronto de ver siempre a los mismos demonios) y debemos reconocer que los enfrentamientos contra los jefes son bastante interesantes, pero, quitando eso, por más que intentamos hacer balance, nos deja la sensación de que es un juego que necesita pulirse un poco más. Sin ir más lejos, algo tan básico como las animaciones de los personajes, nos resultan también algo toscas y poco pulidas.

 

En resumen, Hell Warders es un juego que entretiene, eso es innegable, pero deja ver ciertos atisbos de lo grande que pudo ser, y es precisamente eso lo que nos deja mal sabor de boca. Estamos ante un juego con mucho potencial desaprovechado y que acaba dando poco que hablar. Cuenta con un modo multijugador online que es interesante, sobre todo en el modo difícil, donde es normal necesitar más ayuda de la que nos ofrece la inteligencia artificial. Pero hay cosas que no debemos pasar por alto en esta versión, como los numerosos fallos de traducción o los tiempos de carga innecesariamente largos que posee el juego. Si te interesa este tipo de juegos conocidos como «tower defense», es posible que Hell Warders te de un par de gratas sorpresas, pero la verdad es que es más probable que las demás sorpresas que te dé no sean tan agradables.

 

Hell Warders

Hemos analizado Hell Warders gracias a un código digital cedido por Meridiem Games. Versión analizada: 1.0.3

Hell Warders
Mucho potencial desaprovechado
Hell Warders tiene todos los ingredientes para ser un juego bastante interesante, pero no termina de explotar ninguno. Con un pequeño giro de tuerca a los "tower defense", con elementos más RPG como la elección de personaje en base a un rol y la mejora del mismo (así como de nuestras unidades), la pobreza gráfica y musical, así como lo repetitivo que se hace el gameplay, ensombrecen estas buenas ideas, como los combates contra los jefes, lo mejor del juego sin duda. Por su fuera poco, estamos ante un port, por lo que muchos errores como los de traducción podrían haberse corregido perfectamente.
PROS
Profundidad de mejora de personaje
Las batallas contra los jefes
CONTRAS
Enemigos poco inteligentes
Animaciones pobres
Numerosos fallos y errores sin corregir a pesar de tratarse de un port
45