
El cerebro, en ocasiones, tiene formas misteriosas de funcionar y encuentra placer en lugares insospechados. Sólo así puede explicarse que el simple hecho de meter un manguerazo a presión a una superficie más sucia que el palo de un gallinero resulte tan placentero. Ese momento en el que la mugre hiperconcentrada desaparece y deja lugar a una superficie limpia como una patena… Como diría cierto personaje político, es imbatible. Sólo así se explica que un título con una simplicidad tan aparente como el simulador de meter manguerazos a presión con instrumental especializado haya conseguido el éxito y el reconocimiento suficientes como para lanzar una secuela, PowerWash Simulator 2, que ha llegado a Nintendo Switch 2 y que no hemos perdido la oportunidad de analizar.
Desarrollado por el estudio británico FuturLab Limited, el simulador más placentero del panorama videojueguil vuelve cargado de novedades y sorpresas. Si eres de los que ya cayeron bajo el influjo del primer título y quieres seguir experimentando esa gustosa sensación de dejarlo todo como los chorros del oro, te contamos las novedades. Si aún no has cometido la imprudencia de dejarte atrapar, ¡acompáñanos! Te aseguramos que vas a salir con una gran sensación de satisfacción en el cuerpo. ¿Eres Don Limpio? Ven, te vas a sentir como en casa. El algodón no engaña.
Muckingham no es un lugar aislado
Aunque pueda parecer lo contrario, PowerWash Simulator 2 es un título que tiene algo de narrativa. No se trata únicamente de limpiar todo lo que nos pongan por delante, aunque obviamente esta tarea protagoniza la acción en todo momento. En el primer título, había pinceladas de historia de Muckingham, la ciudad en la que actuábamos, dando sentido y color a los encargos que recibíamos. Durante nuestras tareas de limpieza, cada cierto tiempo llegan mensajes a nuestro dispositivo móvil, en los que los lugareños nos cuentan detalles e historias que dan forma a un mundo que nunca llegamos a ver del todo, sólo sus partes más sucias.
En esta nueva entrega, la narrativa que se iniciaba en el juego anterior continúa y se expande. Ya no sólo operamos en Muckingham, sino en toda una serie de lugares cercanos, todos con nombres relacionados con la limpieza (en inglés, eso sí). Sponge Valley, Lubri City o Detergento son sólo dos ejemplos de lugares que sacarán alguna risa a aquellos jugadores que entienda un poco de inglés, y que amplían un mundo en el que, mientras trabajamos, está sucediendo algo grande: todas las ciudades de la zona compiten por el premio a Ciudad del Año. Y ahí es donde cobra sentido nuestro trabajo: estamos sacando lustre a sus lugares clave para ayudarles en esa competición. Y ganando dinero de por medio, por supuesto.
Un nuevo arsenal a disposición en PowerWash Simulator 2
Otra de las novedades importantes de este juego es la ampliación de equipamiento a nuestra disposición. Donde antes teníamos una única gama de pistolas limpiadoras, cada una más potente que la anterior, ahora tenemos tres. La más básica mantiene una relación equilibrada entre alcance, amplitud y potencia; otra de ellas sacrifica algo de alcance para ganar amplitud y potencia; la última de ellas, mientras tanto, renuncia por completo al alcance y la amplitud y trabaja sólo a corta distancia y en área limitada, pero su espectacular potencia es capaz de dejar cualquier superficie lista para mirarnos en ella como si fuera un espejo.
Cada una de estas armas cuenta con diversos accesorios y versiones superiores que podemos comprar con el dinero que ganamos con los encargos, de forma parecida a como funcionaba en el título anterior, pero en PowerWash Simulator 2 se ha introducido una leve mejora de calidad de vida que se agradece: si antes teníamos que acudir a la tienda a comprar jabón cada vez que se nos terminaba, ahora la cosa cambia. Tenemos jabón todo el tiempo y se repone automáticamente después de usarlo, simplemente tenemos que dejar cierto tiempo entre uso y uso para que el pulverizador de jabón se recargue. Mucho más cómodo que antes… Y ahí no acaban las comodidades.
Listos para llegar a cualquier superficie… Desde nuestra base
El equipamiento accesorio que aparece en los niveles también introduce varias novedades. Donde antes teníamos taburetes, escaleras de mano, escaleras plegables y andamios, ahora los seguimos teniendo, pero se han unido otros dos miembros de lo más interesantes a la familia. El primero de ellos, el elevador de tijera, nos permite subir y bajar a la altura que necesitemos con bastante flexibilidad, lo que nos facilita muchísimo la limpieza de fachadas y lugares altos. El otro, un equipo de rápel para colgarnos de fachadas y carteles, nos permite también movernos con comodidad en vertical y horizontal para limpiar superficies verticales. En cada nivel aparecen siempre las herramientas que vamos necesitar, y queda en nuestras manos usarlas sabiamente.
Otra de las novedades que incluye PowerWash Simulator 2 es la introducción de una base de operaciones. Tenemos nuestro propio despacho, desde el cual acceder a cualquier encargo (y acariciar gatitos), y en la planta baja, todo un espacio en el que podemos colocar muebles. En el trabajo no sólo ganamos dinero, también puntos que podemos usar para comprar skins de personaje y muebles para decorar la base. Esas limpiezas, claro, son mucho más modestas que las habituales de nuestro trabajo. No es lo mismo limpiar una silla o un mueble que limpiar una mansión, un dirigible, o incluso una pista de patinaje o el interior de una iglesia. Porque aquí está otra de las novedades de este título: aquí también hay encargos en interior, e incluso algunos con varias fases que no se desvelan del todo hasta que terminamos una parte.
Si algo funciona, no lo cambies, pero púlelo
El satisfactorio diseño de juego de Power Wash Simulator se mantiene en su sucesor, pero introduce mejoras de calidad de vida en la experiencia. Se mantiene el «DING» que suena al terminar de limpiar un fragmento de superficie, y también la barra que indica cuánto nos queda por limpiar, pero ahora es mucho más clara visualmente. El chorro de agua, antes más plano, ahora añade salpicaduras que lo hacen mucho más realista e inmersivo. Cuando nos va quedando poco, aparece en pantalla un sutil cursor que nos guía hacia la zona que nos queda por limpiar, en vez de perdernos buscando un milímetro cuadrado de mugre en una superficie recóndita. Y la cámara rápida que nos permite ver una repetición de nuestro buen trabajo también sigue ahí. Todo diseñado para darnos gustito al cerebro. Incluso los menús de equipamiento, navegación y tiendas están ahora mejor organizados y son más intuitivos.
¿Significa esto que han mejorado todo lo que podía mejorarse del título anterior? Pues, para ser totalmente honestos, no. En lo artístico, sigue echándose de menos la opción de poner algo de música (el único sonido del juego es ambiental). Las posibilidades tecnológicas que ofrece Nintendo Switch 2 no quedan del todo aprovechadas. Al igual que sucedía en el primer título, se echa de menos poder utilizar el giroscopio en los controles, quedando todo en manos de botones y joysticks. Y el modo ratón, una de las flamantes novedades de la consola y que tan bien encajaría en un título que basa el 90% de su gameplay en un apuntado preciso, es otra cosa que habría estado genial implementar. No es que no se disfrute el juego tal y como está, sigue siendo adictivo a más no poder. Sin embargo, vuelve a quedar ese regusto amargo de la oportunidad perdida.
No limpies solo, limpia acompañado
La experiencia multijugador también está presente en PowerWash Simulator 2, al igual que estaba en la primera entrega. Pero ésta también ha experimentado ciertas modificaciones para ofrecernos nuevas posibilidades. Si en el anterior título podían organizarse sesiones en línea para hasta 6 personas, en esta ocasión el número se ha reducido a 4. Pero aparece una opción que no se encontraba en aquel entonces: el multijugador local a pantalla partida para dos personas. Sólo hace falta una Nintendo Switch 2 para darle caña a la limpieza por partida doble. ¿Gameshare? Por desgracia, podemos contarlo también como una oportunidad perdida de aprovechar al máximo el potencial de la consola.
Otra de las cuentas pendientes que quedan, aunque seguro que acaba siendo anecdótica y temporal, es la ausencia de niveles adicionales. En el primer título, contábamos con decenas de horas de contenido adicional. Tenía niveles de desafío, temáticos y de colaboraciones del nivel de la mansión Croft o Midgar (Final Fantasy 7). ¿Qué pasará con PowerWash Simulator 2 en el futuro? Estamos seguros de que nos sorprenderá con nuevo contenido. Pero en el momento de escribir este análisis, el título está en su estado más crudo, con el modo historia como único modo de juego. Ojo, esto no significa que te vaya a faltar entretenimiento: sigues teniendo para decenas de horas de juego limpiando las decenas de lugares que Muckingham y alrededores pone a nuestra disposición.
PowerWash Simulator 2 – Nintendo Switch. Más limpios que nunca
PowerWash Simulator 2 no viene a inventar nada, sino a afianzar de forma más pulida y mejorada la experiencia del juego original, que ya de por sí era adictiva y capaz de hacer que perdiéramos la noción del tiempo dándole caña al hidrolimpiador. Es una nueva oportunidad para descubrir el placer que puede encontrarse en el simple hecho de dejar una superficie limpia como una patena. Ya sea en solitario o con tus amigos, hermanos o pareja, ahora estamos mucho mejor armados y listos para afrontar la tarea. Relájate, ponte algo de fondo y déjate llevar por el sonido del chorro de agua a presión.
Hemos analizado PowerWash Simulator 2 gracias a un código digital proporcionado por FuturLab. Versión analizada: 1.1.0








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