
Los sudokus son un pasatiempo tradicional japonés. Pero al igual que muchas cosas del País del Sol Naciente, tardaron varios años en hacerse populares fuera de sus fronteras. El punto más alto de la fiebre de los sudoku coincidió con el lanzamiento de un juego de Nintendo DS que quizás os suena: Brain Training del Dr. Kawashima, que venía con más de 100 de estos pequeños puzles mentales. Depende del día, podría defender que el juego de DS fue el que termino de popularizar e introducir en Occidente los sudokus, pero lo que si que es innegable es que abrió las puertas a que mucha gente probase otro tipo de pasatiempos, entre ellos los nonogramas, también conocidos como Picross. Quizás en menor medida que con los sudokus, pero las consolas de Nintendo también están detrás de la popularización de estos pasatiempos gracia a su saga Picross, que aunque empezó en Super Nintendo y Game Boy con Mario Picross, ganando adeptos con cada una de las muchas entregas de Nintendo DS, 3DS y Switch. Tal es la popularidad actual de estos pasatiempos que a día de hoy tenemos revistas en los quioscos y han salido muchos juegos que usan estos puzles incluso como parte de su narrativa o diferentes franquicias que quieren darle su propio enfoque. Hatsune Miku Logic Paint S+ es uno de estos últimos, que aporta una capa de pintura con forma y cara de la diva virtual más famosa y todos sus amigos, a un juego de Picross.
Despeja tu agenta que aquí tienes picross para mucho tiempo
De hecho, esta no es la primera vez que Miku llega a Nintendo Switch con un buen puñado de nonogramas bajo el brazo. La «+» del nombre es debida a que ya existe un primer Hatsune Miku Logic Paint S en Nintendo Switch y otras plataformas, pero con el lanzamiento de esta nueva versión, la anterior queda totalmente desactualizada. Mientras que la versión original contaba con algo menos de 400 rompecabezas distintos, la cifra en esta nueva versión asciende a más de 1200 nonogramas, que van desde pequeñas imágenes de 5×5 pixeles, pasando por las de 10×10, 15×15 y 20×20 hasta llegar a ilustraciones especiales compuestas por 25 puzles de 20×20. Esto lo convierte en el juego tipo Picross con más contenido hasta la fecha en Nintendo Switch, si no contamos Picross S+ con todos sus paquetes de expansión que se compran por separado. Si sois de los que disfrutáis de sentaros delante de un nonograma, Hatsune Miku Logic Paint S+ tiene contenido para varios meses, aunque no os guste o conozcáis a la diva del pelo y coleta azules para nada.
«¿Pero que son los dichosos nonogramas?» Se tratan de unos rompecabezas en los que se nos presenta una cuadrícula en blanco, acompañada de unos números que generalmente están en los márgenes izquierdos y superior. Estos números nos indican la cantidad de cuadros consecutivos a rellenar en esa fila y columna. Si hay varios números, significa que hay varios bloques de cuadros que hay que rellenar. De esta forma se crean unos puzles de lógica matemática, que poco a poco van revelando una figura en un estilo pixelart. La única gran pega, es que todo esto sería más fácil y cómodo de hacer, si se permitiese la opción de jugar usando la pantalla táctil, en vez de usar solo los botones.
Otra de las novedades respecto a la primera versión del juego, es la posibilidad de personalizar la ropa y accesorios de Miku y sus amigos, así como distintos elementos de su habitación y las canciones que suenan al hacer los puzles. Para conseguir tanto la ropa como los muebles, hay que completar puzles cumpliendo una serie de requisitos. Esto añade dos cosas al juego: por un lado una sensación de progresión, evitando que solamente sea hacer picross por hacerlos, lo cual no es malo de por sí, dado que es el objetivo básico del título. Por otra parte, añade una capa de desafío y reto que de normal no existiría, más allá del reto personal de hacerlo bien, al no haber penalización de ningún tipo por fallar de otra manera. Aún con este reto, Hatsune Miku Logic Paint S+ es bastante permisivo al permitir hasta tres errores antes de fallar el objetivo asociado a los fallos. Y sin duda esta manga ancha es algo que también ayuda a los jugadores menos experimentados con los picross, pues uno de los fallos más gordos que encontramos es que no es nada amigable con los jugadores nuevos. Apenas hay puzles de 5×5 que sirvan para afianzar las mecánicas básicas de resolución. De 10×10 hay alguno más, pero rápidamente la dificultad salta a los de 15×15 y 20×20.
Hatsune Miku Logic Paint S+ – Más, mejor y con la lección aprendida
En el género de los juegos de puzles es complicado mejorar de una entrega a otra, sin embargo Hatsune Miku Logic Paint S+ lo hace en todos los aspectos. Como no puede cambiar, ni mejorar las reglas del pasatiempo, lo hace mejorando el resto de apartados: mejores animaciones y diseños para los personajes, más personalización, más canciones, más ilustraciones y cuatro veces más contenido en cuanto a puzles se refiere. Si lo que te gustan son los picross, aquí tienes más de 1200 para echar horas, semanas y meses, aunque no conozcas de nada a Hatsune Miku. Si como yo, eres de la parte en la que se sobreponen los dos círculos de ese diagrama de Benz, ir descubriendo nuevos trajes e ilustraciones es un extra que suma y le pone la guinda al pastel. Y como regalo, os dejo un picross que podéis resolver para conocer la nota del análisis.
Hemos analizado Hatsune Miku Logic Paint S+ gracias a un código digital cedido por Komodo. Versión analizada: 1.01









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