Al igual que otros muchos jugadores de la saga Zelda, ando con la cabeza en ebullición tras haber visto el tráiler que, por fin, ha dado nombre a Tears of the Kingdom, la esperadísima secuela de The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Es el tercer tráiler que recibimos, y aunque apenas muestra unos segundos de gameplay, sus imágenes resultan bastante evocadoras. No diría reveladoras, porque es difícil otorgarles significado sin más contexto… Pero dan para pensar. Y mucho. Ya han pasado más de 3 años desde el anuncio del título, y en NextN dimos vueltas al primer tráiler, buscándole sentido. Va tocando hacer lo mismo con los otros dos tráilers, ¿no? Comenzaremos con el tráiler de 2021. Pero antes, recuperaremos ciertos aspectos del análisis de 2019.
Los aspectos más claros que se pudieron ver en el primer tráiler de Zelda: Tears of the Kingdom eran los símbolos Gerudo alrededor de esa misteriosa momia, que no dudamos de que es Ganondorf. También se especuló con un posible doble protagonismo de Link y Zelda, debido a que se les veía trabajando estrechamente, y lo que parece ser la nueva mecánica base del juego: el brazo del héroe. La Maldad vuelve a liberarse, y el castillo de Hyrule se alza en el cielo. Estos aspectos son los más concluyentes que podían verse en el fragmento mostrado en 2019. Algunos de estos pilares han ganado fuerza, y otros se han diluido.
Nos precipitamos con Zelda y nos dejamos caer junto a Link
La teoría de la Zelda jugable fue eliminada de un plumazo nada más empezar el tráiler de 2021. La princesa caía al vacío, y todo parece indicar que tendremos que volver a rescatarla. No se descarta del todo la opción de poder jugar con ella más adelante, pero parece muy improbable. Ella se precipita al abismo… Y Link se deja caer desde el cielo, mostrando un aspecto muy distinto al que acostumbra. Durante el tráiler podemos ver al héroe con dos peinados diferentes: su peinado clásico, con el pelo más recogido, y el peinado «salvaje».
Además, hay una diferencia considerable en su indumentaria. Mientras que el Link con la túnica de Elegido lleva unas botas con un diseño más «moderno» y guantes, el Link «salvaje» presenta sus brazos desnudos y lleva un calzado con un aspecto mucho más rudimentario y primitivo. La versión «salvaje» del héroe aparece en todas las escenas de cielo, y el Link «Elegido» sólo se deja ver en las escenas sobre el terreno. ¿Son meras coincidencias, están jugando al despiste con las imágenes mostradas, o nos hallamos realmente ante la posibilidad de que haya dos Links en dos épocas diferentes? ¿Es posible que Link revisite y viva desde dentro los recuerdos de un antepasado? Son opciones muy a tener en cuenta.
Los enemigos han cambiado… Un poquito
El tráiler de 2021 de The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom ya nos dejaba echar un vistazo a algunos enemigos. Hay enemigos nuevos, como ese monstruo gigante que emerge del techo, y un personaje de color verde y aspecto arcaico que, en realidad, no aparenta ser demasiado hostil. Pero, ¿qué ha sucedido con los bokoblin y los moblin? Los primeros ahora tienen un cuerno mucho más grande y se han aliado con los Petrarok, formando fortalezas en miniatura, y los segundos han aprendido a usar casco. Posiblemente, nos hallemos ante una versión mejorada de los enemigos, que ha surgido gracias a que la Malicia ha emergido en todo su esplendor.
También vemos que Link tiene ahora nuevas armas y formas de combatir. Podemos descargar que el ataque de fuego pertenezca a su brazo corrupto, dado que se lanza con el brazo izquierdo a través de un arma bastante aparatosa. En cambio, el derecho muestra nuevos poderes, como el de hacer que el tiempo de un objeto retroceda. Un poder que no parece relacionado con la Piedra Sheikah, pero que recuerda un poco a ella. Y parece ser que ésta, valga la redundancia, será poco más que un recuerdo esta vez. No hay ni rastro de ella. Ni en este tráiler, ni en el de 2022.
La erupción de maldad
El castillo de Hyrule se ha separado de la tierra y ahora está flotando en el aire, sostenido por una fuerza oscura, pero para nada misteriosa. Ya nos familiarizamos lo suficiente con la Maldad de Ganon, el Cataclismo, en Breath of the Wild. Pero Ganon no era más que una sombra corrupta y deformada por la fuerza del Mal. Sin embargo, el regreso de Ganondorf en todo su esplendor significaría una capacidad mayor de controlar y utilizar la Maldad, lo cual da sentido a los enemigos aparentemente más peligrosos, y a que el simple poder del Mal tenga ahora la fuerza suficiente para que el suelo de Hyrule se abra y el castillo, al igual que tantos otros fragmentos del reino, se separen de él.
Lo que parece seguro, con respecto al anterior tráiler, es que el Sello que contenía al malvado se ha debilitado. Esto ha permitido su despertar. Lo que no parece tan claro es cuál es el origen del brazo de Link. Las uñas más alargadas se ven en este tráiler más claras que nunca, lo cual hace pensar que tiene mucho que ver con el héroe «salvaje». Puede que este héroe sea el que aparece en el tapiz que narra la historia del Cataclismo, y que el poder de rebobinar el tiempo venga de ese héroe, o de la energía mística que sellaba a Ganondorf. Es posible que, al debilitarse el sello, parte de su poder se transfiriera al brazo de Link. O puede que el brazo haya sido corrompido por la energía oscura, y esa magia luminosa esté haciendo de dique de contención.
Zelda: Tears of the Kingdom nos devolverá las mazmorras
La imagen de Link atravesando la tierra y llegando a una isla en el cielo nos muestra un paisaje muy distinto a los paisajes de Hyrule que conocíamos, con distinta vegetación y diferente arquitectura. Los paisajes desconocidos dan fuerza a la posible teoría de que visitemos otro momento distinto del tiempo, mucho antes de Breath of the Wild. A su vez, la arquitectura, con un diseño muy icónico, deja entrever que The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom abrirá la puerta a algo que se echaba de menos en su predecesor, al menos en su forma tradicional: las mazmorras y templos.
Aunque la fórmula de Breath of the Wild ha gustado a propios y ajenos, uno de los puntos negativos que encontraban la mayoría de fans de la saga era la pérdida de las mazmorras tal y como las conocíamos tradicionalmente. Lugares icónicos, emblemáticos, llenos de puzles y secretos que explorar. Los santuarios, siendo tantos como eran, no dejaban de ser mazmorras venidas a menos, con puzles mucho más localizados y menores, sin tanto que explorar. Las Bestias Divinas, a su vez, eran una reinterpretación muy interesante, pero que no desprendía tanta personalidad como los clásicos templos de la saga. La arquitectura del cielo hace pensar que las clásicas mazmorras volverán.
Lo cierto es que el tráiler de 2021 es el tráiler menos revelador de los tres en cuanto a la posible trama de The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom. Mientras que el primero nos enseñaba el despertar de Ganondorf y el encantamiento del brazo de Link, el segundo nos deja ver cómo Zelda vuelve a desaparecer del mapa, algunas mecánicas, armas y enemigos nuevos, y sobre todo, los islotes elevados en el cielo. Nos ayuda a descartar ciertas opciones, a abrir otras, y a asentar ciertas bases. Sin embargo, la carga narrativa aún estaba por venir. Tenemos muchas teorías acerca del último tráiler hasta la fecha. Pero eso es tema para el siguiente artículo, que podrás leer mañana mismo.
Debe estar conectado para enviar un comentario.