La venta de Rare a Microsoft no fue motivo de alegría para los fans de Nintendo, pero nos consta que tampoco para muchos de los trabajadores del mítico estudio británico, que de tanto en tanto comparten sus experiencias sobre lo sucedido.
A Phill Tossell lo hemos escuchado alguna que otra vez. El creativo se encuentra en estos momentos desde Nyamyam desarrollando Tengami, pero aún tiene tiempo para hablar de lo que sucedió a principios de la pasada década:
«Creo que recibimos un regalo envenenado. Nos pidieron hacer los juegos que siempre habíamos hecho para un público que no quería ese tipo de juegos. La razón hicimos Black Widow, Crackdown y un Kameo más maduro fue porque tratábamos de llenar ese vacío, pero Microsoft no nos dejó.»
Tiene su lógica; el público de Rare estaba en Nintendo, por lo que sus primeros juegos no iban a ser tan bien recibidos si no se adaptaban a la nueva situación, pero según dice, Microsoft no se lo permitió.
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