Darkestville Castle

Análisis Darkestville Castle – Nintendo Switch. Una aventura gráfica demoníaca

Darkestville Castle
Fecha de lanzamiento
13 agosto, 2020
Número de jugadores
1
Idiomas
Voces: inglés y ruso. Textos: español, francés, inglés, etc
Tamaño de la descarga
1.433,00 MB
Nuestra puntuación
79

Epic Llama es un pequeño estudio independiente situado en Córdoba, Argentina. Si ya es complicado para este tipo de equipos lanzar videojuegos en Europa, en países de América Latina, que se encuentran en su mayoría en una fuerte crisis económica, lo es aún más. Por lo tanto, hay que darle todo el mérito que merece que, a pesar de las dificultades, hayan podido desarrollar un título de tanta calidad como es Darkestville Castle. Juego que algunos conocerán y que, incluso, habrán podido completar, ya que se lanzó en Steam en septiembre de 2017. Sin embargo, hoy nos toca hablar de la versión de consolas, que llega al mercado gracias a la distribuidora Buka Entertainment. A pesar de que, solo hemos probado la versión de la híbrida de Nintendo, ya os adelantamos que, aunque también salga para PlayStation 4 y Xbox One, la versión de Switch es la que mejor nos va a permitir disfrutar de esta aventura gráfica.

 

 

Un protagonista un tanto… gamberro

En esta ocasión no encarnamos a un héroe o un ávido aventurero, sino a Cid, un demonio cuyo único objetivo en la vida es aterrorizar al pueblo de Darkestville. Tras una serie de acontecimientos, que tienen lugar en la introducción del juego, Domingo, la mascota y compañero de piso de nuestro protagonista desaparece, por lo que nuestro objetivo principal es traerlo de vuelta a casa. Aunque, finalmente, nuestros pasos terminan llevándonos a algo mucho mayor.

 

Una historia interesante, que engancha de principio a fin. Contada en algunas cinemáticas, pero, sobre todo, en las vivencias y conversaciones de Cid con otros personajes. Todos ellos muy caracterizados y con mucho carisma. Un conjunto de narrativa y personajes, que tiene su guinda en los escenarios que visitamos, tan tétricos como coloridos, que otorgan mucha personalidad al pueblo de Darkestville. Además, no faltan diálogos, chascarrillos y comentarios plagados de humor y referencias, que suelen ser habituales en el género.

 

Darkestville Castle

 

Volvamos por un rato a la década de los 90

Tras casi medio centenar de juegos analizados a mis espaldas, Darkestville Castle es la primera aventura gráfica y, debo reconocer que, escribir este texto se me ha complicado tanto como algunos de sus puzles. Dificultades debidas al propio género, ya que, escribir sobre un título del estilo, con una jugabilidad sencilla y cuyos puntos fuertes son historia y puzles, de los que hablar más de la cuenta puede afectar a la experiencia del jugador, convierte el análisis en un reto más.

 

Jugablemente es un clásico point and click; controlamos un cursor con el que interactuamos de diferente forma con los elementos que nos encontramos en el escenario. Tenemos tres formas de interacción, una opción física, ya sea coger, tocar o empujar; otra de las opciones nos permite mirar, que suele ser más útil para el jugador que para el personaje, ya que Cid da información, relevante o no, de lo que estemos observando; o hablar, con el que iniciamos una conversación en la que aparece una caja de texto con varias opciones de diálogo. También podemos hacer uso de los objetos que tengamos en nuestro inventario, directamente con el escenario o usándolos entre ellos para crear nuevos ítems.

 

Mecánicas sencillas, pero que cumplen perfectamente su cometido; dar al jugador las herramientas necesarias para resolver los puzles que se proponen y, como hemos dicho, son éstos junto con la historia el punto más importante en el género. Como los clásicos del género, la gran mayoría de éstos tienen una solución lógica y deducible, mientras que otros son más enrevesados y, en alguna ocasión, absurdos. Tomando como inspiración las aventuras gráficas de los 90, nuestra labor en Darkestville Castle se basa en recorrer los distintos escenarios buscando los elementos que nos sirven para resolver los rompecabezas que nos permiten avanzar en la historia.

 

Darkestville Castle

Por su parte, el juego nos da herramientas “extra” que nos facilitan nuestra labor. Con un botón, podemos ver todos los objetos del escenario con los que podemos llevar a cabo alguna acción o los lugares a los que desplazarnos. Además, las conversaciones que tenemos con los otros habitantes de Darkestville esconden alguna que otra pista, que son de mucha utilidad de cara a resolver los rompecabezas. Por su parte, el juego tiene otro modo de dificultad, el modo felino; en el que se incrementa notablemente la dificultad. Todos los textos se sustituyen por maullidos de gato, por lo que este aumento de dificultad, más que esto, busca dar un toque de extrema absurdez al título.

 

Un punto positivo que hay que reconocerle a Darkestville Castle es su control. Algo que suele fallar en los juegos de Nintendo Switch es la carencia de controles táctiles. Muchos de los juegos, incluso de los triple A que salen en la consola y a los que le vendrían a la perfección –me viene a la mente la gestión de cajas en Pokémon– no aprovechan esta funcionalidad de la consola. Por lo que, que sean juegos independientes los que sí lo usan, es algo que me ha sorprendido bastante y que, en este caso, hace la diferencia con las otras versiones de consola. La posibilidad de tocar la pantalla para interactuar con el escenario, en vez de mover un cursor con el stick, hace que jugar en modo portátil sea la forma con más cómoda y que nos da más posibilidades para disfrutar del título.

 

Técnicamente estamos hablando de un título notable en todos los sentidos. Haciendo uso de un apartado gráfico propio de unos dibujos animados, con una paleta de colores muy llamativa, capta la atención del jugador desde el primer momento. Además de sus diseños, tanto de personajes, como de los escenarios dotan de mucha personalidad al título. Todo ello acompañado con una buena banda sonora y, sobre todo, un doblaje al inglés de muy alto nivel, hacen que la inmersión sea genial. Aunque el doblaje solo esté disponible en inglés o ruso, los textos y subtítulos sí están en español, aunque hay que apuntar, a modo de curiosidad, que es más cercano al español latino.

 

 

Darkestville Castle – Lo bueno si breve, dos veces bueno

Darkestville Castle es una aventura gráfica que, si se hubiera lanzado al mercado en la década de los 90, bajo el sello de Lucas Arts, no habría desentonado en ningún punto con otros juegos de la compañía. Bebe de los clásicos de la época, aunque si tuviera que elegir uno en concreto, me ha traído muchos recuerdos de The Curse of Monkey Island, la tercera aventura de la saga. Una buena historia, con personajes carismáticos y unos puzles complejos, pero no imposibles, hacen que sea uno de los imprescindibles para los amantes del género. La duración del mismo, unas 6 ó 7 horas, idónea según la jugabilidad propuesta, menos sería demasiado corto y más, podría terminar por hacerse demasiado largo. Por su parte, su precio de 14,99 €, se adecúa al producto que se nos ofrece, por lo que, si os llama la atención, no dudéis en lanzaros por él. Sin embargo, si queréis salir de dudas, os recordamos que la introducción ya puede disfrutarse, en forma de demo, que se puede descargar en la eShop.

 

Darkestville CastleHemos analizado Darkestville Castle gracias a un código digital cedido por Buka Entertainment. Versión analizada: 1.0.0

Darkestville Castle
Si te gustan las aventuras gráficas, ni te lo pienses
El género de las aventuras gráficas, que tuvo su auge a finales de siglo pasado, está en decadencia. Por lo que es de agradecer que lleguen joyas como Darkestville Castle para satisfacer las necesidades jugables de los amantes del género.
PROS
La narrativa, tanto en forma como fondo
La facilidad de usar la pantalla táctil
Su doblaje al inglés
CONTRAS
He echado en falta una opción para ir rápido al mapa
Los botones de acción en la pantalla, son pequeños y a veces pulsas una opción incorrecta
79