Análisis Temtem – Nintendo Switch. Un nuevo enfoque al coleccionismo de monstruos

Fecha de lanzamiento
06/09/2022
Número de jugadores
1
Idiomas
Español, inglés, alemán, etc.
Tamaño de la descarga
7,1 GB
Nuestra puntuación
75

Hoy no nos toca hablar de un juego, sino de un proyecto a largo plazo. Pokémon (que sigue siendo la franquicia por antonomasia en el género RPG de coleccionar monstruos) seguía buscando apelar a un público mayor, y un cierto sector de los jugadores (ni muy grande ni muy pequeño) buscaban y pedían algo más, un desafío en toda regla. Es aquí donde Crema Games, el estudio español conocido por juegos como Immortal Redneck, inició su andadura: desarrollar un RPG dentro de ese mismo género, pero que apelara a aquellos jugadores que querían dificultad a cada paso. Y así fue como nació Temtem.

 

Temtem (título que la compañía ya ha mencionado muchas veces que está inspirado en Pokémon, por lo que las comparaciones son obvias) no solo se centraba en la dificultad como principal atractivo para su financiación, sino que ofrecía algo que ciertos jugadores ya pedían desde hace tiempo para la franquicia de GAME FREAK: ser un MMO. Poder explorar cualquier zona y encontrarte con otros jugadores con los que poder interactuar, hablar o retar en combate. Tras su éxito en Kickstarter, el proyecto empezó a tomar forma como beta cerrada y Early Access en Steam, añadiendo cada una de las islas explorables, continuando la historia y añadiendo nuevos Temtem cada cierto tiempo. Aquello empezó en 2018…

 

Y ahora, cuatro años después, nos encontramos con el esperadísimo lanzamiento de Temtem en Nintendo Switch (junto a la versión oficial 1.0). Bueno, el juego lleva disponible un tiempo, por lo que quizá os extrañe lo que hemos tardado en publicar este análisis. Pero os puedo asegurar que se trata de un juego largo y desafiante que nos ha llevado bastante tiempo completar, y aun así nos falta bastante por ver. Pero ya va siendo hora de que os abramos las puertas del Archipélago para descubrir sus secretos, de modo que… ¡Temtem up!

 

 

Peleando con uñas y dientes… y cristales, y viento, y datos, y…

Las bases de esta clase de juegos las conocemos todo el mundo, ¿verdad? Hay monstruos, los capturamos y entrenamos, y luchamos contra otros monstruos. De momento todo bien. A partir de aquí, borrón y cuenta nueva: jugar a Temtem supone empezar de cero y cambiar la mentalidad con la que afrontamos este género. ¿La primera gran diferencia? Combates dobles. Todos los combates en este juego se rigen por la regla del 2 vs 2, lo que supone tener en cuenta estrategias y combinaciones de Tems que nos ponen en más de un aprieto. La compatibilidad de tipos también es importante, pero aquí lo es incluso más: aprovechar las debilidades puede suponer derrotar a tu rival de un ataque… o que te derroten a ti. Este juego acostumbra al jugador a enfrentarse a la derrota y a obligarle a cambiar de Tems cada dos por tres para aprovechar las debilidades y ventajas de tipos.

 

 

Otro elemento importante es el sistema de stamina: los Tems tienen una barra de stamina y cada movimiento gasta una cantidad concreta. Esta se recupera cada turno, pero poco. ¿Qué pasa si usamos un movimiento que gasta más stamina de la que tenemos? Nuestro Tem recibe un daño equivalente a la que faltaba y no puede actuar el siguiente turno. Aquí entra en juego la opción de Descansar (que tu Tem no actúe en un turno para recuperar más stamina de lo normal). Se trata de otro factor estratégico en los combates: encontrar el equilibrio entre atacar y descansar, o estar dispuestos a sacrificar a un Tem si podemos derrotar al rival. Esto conecta muy bien con los movimientos con espera: algunos ataques no se pueden usar al instante, sino que debes esperar unos turnos para usarlos. Como veis, cada una de nuestras acciones está calculada al detalle, y no podemos dejar nada al azar… literalmente. En Temtem no existe el RNG (generador de números aleatorios) en los combates: ningún ataque falla, siguen un orden según velocidad y prioridad, todos los efectos alternativos surten efecto durante unos turnos concretos, etc.

 

Todo esto está muy bien, pero no es lo único que aporta esa dificultad extra. Por una vez, los personajes piensan. La IA de este juego está bien lograda, haciendo que los NPC contra los que luchamos aprovechen las debilidades de nuestros Tems para superarnos. De hecho, la sorpresa te la llevas cuando no lo hacen (en más de una ocasión me he dicho “¿por qué no me ha hecho un ataque eléctrico si podía ganarme?”). Y cuando llegas a los maestros del dojo (el equivalente a los líderes de gimnasio), el desafío es mayor, empezando con que todos ellos utilizan un equipo completo de 6 Tems, incluso la primera. Tienes que prepararte bien para el combate, o lo pasas mal.

 

El Archipélago y el Clan Belsoto

Pasamos ahora un poco a hablar de la historia. El comienzo es similar a otros tantos juegos: es la Víspera del Aprendiz y tú (después de haber personalizado a tu personaje y haber elegido tus pronombres, muy importante) te embarcas en una aventura para ser domador de Temtem, con la guía del profesor Konstantinos y Max, le rival de toda la vida al que no conoces pero que desde el primer momento ya le tienes manía por ser un engreíde envidiose. Al principio la historia es más relajada, hasta que te cruzas con el Clan Belsoto (recordad, los Belsoto comen caca), una organización criminal que crea el caos por todas partes. A partir de aquí, toda la historia se centra en esta batalla contra el Clan Belsoto. No hay leyendas ocultas ni Tems legendarios (bueno, sí hay alguno, pero no pintan nada), e incluso derrotar a los maestros del dojo sirve más como pretexto para obtener su ayuda o conocer mejor la situación que como objetivo a alcanzar. Quizá lo que podría haber dado más de sí es el final, ya que consiste simplemente en “este es el malo y quiere conquistar todo, a por él”, aunque a veces un buen personaje malvado puede ser el que simplemente es malo y punto. Eso sí: se trata del combate más complicado y enrevesado de todo el juego.

 

 

Esta guerra nos lleva a lo largo y ancho de las 6 islas que forman el Archipélago: un conjunto de islas que giran en torno al Pansol, y cuidado con caerte porque vas directo al Infabrismo. Cada una de estas islas tiene su propia temática, diseños e inspiración en localizaciones y culturas reales: Deniz (la isla inicial) tiene una influencia más mediterránea, mientras que Cipanku se inspira más en Japón. No os engañéis con la palabra “isla”: los mapas son extensos, las rutas son largas y con muchos domadores contra los que luchar, y hay todo tipo de secretos y cuevas que descubrir. Conocer todos los recovecos lleva bastante tiempo, sobre todo cuando te limita no tener todas las herramientas. Como sustituto de las conocidas MO de Pokémon, aquí obtenemos objetos como una tabla de surf o unos patines de cristal (con el suplicio y sufrimiento que causan, ya descubriréis por qué) que nos dan acceso a nuevas zonas, lo que supone añadir una capa de “retro exploración”.

 

Pero sin desviarnos del tema, el diseño y el mimo con el que han creado cada una de las islas es admirable, ya sea por los edificios, los bosques o los páramos. Esto tiene una fuerte conexión con los Temtem, y no solo porque los diseños de las criaturas reflejen los tipos que les corresponden. Cada isla es “temática” en el sentido de que predominan dos tipos de Tems (por ejemplo, en Deniz predominan el tipo Agua y Viento). Los entornos nos muestran desde el principio qué clase de monstruos nos podemos encontrar en ellos. A nivel gráfico, el juego es agradable: no es el juego más exigente en Nintendo Switch, pero todo, hasta los escenarios de combate, están muy bien diseñados (aunque sí nos encontramos problemas de rendimiento que vemos más adelante). Además, las animaciones de los movimientos están muy logradas y son muy divertidas. Y las melodías son muy animadas, con canciones inspiradas en cada una de las regiones con ritmos muy dispares, aunque ello no nos impide escuchar la canción principal del juego cada vez que luchamos contra un oponente.

 

Lo bueno y lo malo de ser un MMO

Aquí nos encontramos con un tema bastante importante. Mucha gente pedía un MMO de Pokémon, y Crema Games se propuso hacerlo. Con tiempo y esfuerzo, ese logro está aquí. Ahora bien, ¿merecía realmente la pena? Porque, al pensar en un MMO, muchos piensan lo que he dicho antes (ver a los otros jugadores e interactuar con ellos), y eso en cierto modo está ahí. Pero la verdad, no notamos que ese sea el beneficio principal que ha adquirido Temtem por ser un MMO, sino que nos encontramos otras tantas inspiraciones e ideas que quizá no pegan con el género.

 

 

La primera en la frente: necesitas Internet. Por supuesto, hoy en día es raro no tener una consola conectada a Internet… salvo que estés jugando en Nintendo Switch. Tenemos una consola cuya concepto principal es poder llevarla donde quieras y jugar. Tenemos un género (estilo Pokémon) que se beneficia de llevarlo donde quieras y jugar con otra gente. Pero eso con Temtem no puede ser, porque no puedes jugar si no estás conectado a Internet. Habría estado bien que la conexión fuera opcional, o bien que si no detecta ninguna red puedas jugar por tu cuenta. Según el estudio, no lo hacen para evitar que los jugadores modifiquen sus partidas y hagan trampa, y no les falta razón. Pero ese afán por mantener un entorno de juego justo le supone una desventaja contra otros juegos del género.

 

Después nos encontramos con una gran lista de misiones secundarias, lo cual hace que tengas más cosas que hacer… si no fuera porque muchas de ellas son de “recadero”. La inmensa mayoría de misiones se centran en andar de un lado a otro y hablar con A o con B y volver al punto original. ¿Os suena? Suele ocurrir mucho en los MMO (aunque hubiera estado bien añadir misiones del tipo “derrota X Tems” para darle algo de variedad). Se supone que deberían servir para dar más profundidad al mundo y a sus personajes pero, la verdad sea dicha, la mayoría de ellas no son memorables. Todo se vuelve más frustrante cuando empiezas a aceptar misiones y descubres que muchas de ellas no se pueden completar hasta que no llegues a X isla o avances a X punto de la historia. Por ejemplo, desde el principio tenemos la opción de encontrar pegatinas y ponerlas en un álbum. Estas pueden ser buenas o dañadas, pero las dañadas no se pueden pegar. ¿Qué hacemos entonces? Primero conseguir 20 buenas, y después descubrimos que hay alguien en la última isla que las puede reparar. Pero incluso cuando llegamos a la última isla (lo que supone unas buenas 20 horas de juego), tenemos que completar la historia antes de pensar siquiera en reparar pegatinas. Y como esta hay otras tantas misiones que plantean el mismo problema de “completa esta misión, pero no puedes hasta más tarde”.

 

Temtem

 

También tenemos los mencionados problemas de rendimiento. Temtem en sí no es un juego exigente, pero nos encontramos con tirones en la imagen y largos tiempos de carga. ¿Por qué? Por ser online. Cada vez que cambias de isla, tiene que cargar a los jugadores que están en ella, lo que lleva tiempo. Y si en la zona hay muchos jugadores, los frames bajan bastante. También nos hemos visto las caras con bugs: algunos ya solucionados, otros no tanto, aunque tenemos la certeza de que el equipo trabaja duro para corregirlos. Por último, la economía está fatal. O sea, no me refiero al mundo real (que también), sino a Temtem. Los objetos normales tienen un precio normal y asequible, pero cuando vamos a lo más llamativo de un MMO, los precios se disparan. La ropa y los muebles para nuestra casa son muy caros para lo que ganamos en los combates, y te ves obligado a no pensar en esas cosas hasta el final o ahorrar mucho. Incluso al final, dependes de las actividades adicionales y mucho esfuerzo para poder costearte cualquier cosa.

 

Lo que no hemos probado y por qué

Si habéis llegado hasta aquí, enhorabuena. Descansad, id al baño, tomaos un vaso de agua o echaros en el sofá. Porque, ¿veis todo lo que he hablado hasta ahora? Pues aun así, hay muchas cosas que no hemos probado en Temtem, y todo tiene que ver con el problema que hemos mencionado antes.

 

Es decir, Temtem es un juego largo. Rutas largas, muchos combates, una historia llamativa y mucha exploración garantizan que pueda llevarnos mínimo 25 horas completar el juego por primera vez. Y podíamos haberlo completado sin desbloquear algunas de las cosas que ya hemos visto, y que nos refuerzan esa sensación de “han tomado cosas de los MMO que no deberían”. Tenemos los combates online (la prueba de fuego de los domadores) donde no hay queja, e incluso añaden una capa extra de estrategia con una selección previa en la que cada jugador puede seleccionar qué Tems usa en combate y prohibir alguno del rival. Pero después tenemos la casa de subasta, donde vendemos Temtem u objetos para ganar dinero. Parece la forma de ganar dinero para comprar lo que antes no podíamos, pero no me reconforta verlo en esta clase de juegos. También pudimos obtener una caña de pescar (después de completar la cuarta isla) y un teletransportador injusto porque necesitas volver a visitar cada lugar para activar el punto de teletransporte, y encima, salvo que vayas a los puertos, tienes que pagar dinero cada vez que te teletransportas.

 

 

Pero entonces, ¿dónde está el problema? Que muchas de estas cosas y las que no hemos probado se desbloquean mediante enrevesadas misiones secundarias. ¿El teletransportador? Recorre la isla buscando una nevera pérdida. ¿Los Lairs, una prueba cooperativa muy difícil con la que obtener los Tems legendarios? Primero encuentra donde están cada uno, y después resuelve un complicado puzzle para acceder. ¿Conseguir tu casa? Viaja un montón y habla con un montón de gente. ¿Los santuarios para entrenar más rápido? Pues una prueba especial en la que derrotar a 4 domadores solo usando el tipo al que corresponde el santuario. ¿Las batallas entre clanes? Ni siquiera las he oído mencionar. Incluso el Paraíso de los Archidomadores, la gran prueba final (el equivalente al Frente de Batalla de Pokémon y el principal punto promocional de su versión 1.0) supone una serie de misiones complicadas para desbloquearla. Todo ello supone mucho más tiempo y dedicación. Por supuesto, está bien si quieres hacerlo, y sería algo “normal” si fuera un juego al más puro estilo MMO. Pero Temtem no lo es. Toda la historia, todo lo que he hecho hasta ahora, lo hemos podido hacer sin relacionarnos con nadie, porque no lo necesita. Temtem no es un MMO, sino un juego que toma elementos de los MMO, y en ocasiones como esta, quizá ha tomado los elementos que no debía y que hace que solo los disfruten aquellos que estén dispuestos a dedicarle todo el tiempo del mundo.

 

Temtem – Una aventura diferente, pero no por ello mejor

Lo primero en lo que piensan algunos es “Temtem es mejor que Pokémon”. Quizá sean esas las palabras que esperáis que diga, o al menos esperáis que diga que uno es mejor que el otro. Pues… os vais a llevar un chasco. Temtem no es mejor que Pokémon, ni al revés… son diferentes. En su esencia, Temtem es un gran juego dentro del género. Los diseños de las criaturas (salvo algunas excepciones) son interesantes, llamativos y originales. Los entornos son vistosos, me gusta la música, los combates han estado bien, y ha sido divertido jugar a algo un poco más difícil a lo que tengo la costumbre. A nivel de historia, es diferente y te pone en situaciones complicadas, pero es entretenida.

 

Pero después, ves todo el esfuerzo y el trabajo que tienes que hacer para acceder a ciertas cosas o seguir explorando y puede resultar abrumador. Porque la clave de esta clase de juegos es que te inciten a explorar, que vayas poco a poco y que te diviertas con la aventura en sí. O en según que ocasiones, que no te tengas que quebrar mucho la cabeza para “desbloquear” algo. Pero si a cada paso que quieres dar te ponen quinientas tareas antes, pues llega un punto en el que te preguntas si merece la pena ese esfuerzo para llegar a algo que después te requiere incluso más trabajo.

 

Por eso no puedo decir que una franquicia sea mejor que la otra, porque cada una tiene sus virtudes y sus defectos, y porque el propio equipo de Crema Games no pretende crear esa competición, sino que Temtem coexista junto a Pokémon. Y en ese sentido han logrado un buen trabajo. Temtem es un gran juego para los que buscan algo diferente y más desafiante, pero desde aquí os digo que en el momento en el que el juego pasa de “desafío” a “odisea griega”, no pasa nada malo por dejarlo y buscar otra cosa.

 

Temtem

Hemos analizado Temtem gracias a un código digital cedido por Crema Games. Versión analizada: 1.0.1

Un nuevo mundo con nuevas criaturas que entrenar
Temtem pretende ofrecer una experiencia diferente a la de su gran inspiración, y lo logra. Desde el principio, los combates adquieren ese toque estratégico que muchos buscan, con muchos desafíos a lo largo del camino. Los mapas son enormes y enrevesados, y la historia se complica por momentos. Lo que ya no encaja tan bien son tantos aspectos habituales de los MMO y los inmensos requisitos para desbloquearlos, algo solo al alcance de los domadores más concienzudos. Pero como experiencia para un jugador, ha resultado grata y recomendable.
PROS
Todo un reto desde principio a fin, con un sistema de combate complejo y divertido
Las animaciones y los gráficos están muy bien hechos
Tan solo superar la historia ya supone una larga aventura por delante
CONTRAS
El juego no rinde tan bien dado el factor online
Bloquea muchas opciones y modos de juego detrás de misiones secundarias largas y tediosas
Algunos bugs ocasionales
75