A Gummy's Life

Análisis – A Gummy’s Life (Nintendo Switch). ¿Quién le ha dado un bocado a mi chuche?

Es la hora de las (dulces) tortas

A Gummy's Life
Fecha de lanzamiento
25 de septiembre de 2018
Género
Lucha
Precio
14,99 €
Nuestra puntuación
62

Hacer un videojuego centrado en una experiencia multijugador no es fácil. No solo hay que tener en cuenta aspectos como el diseño de los niveles y el planteamiento, balanceo y diferenciación de los personajes; sino que además hay que crear y mantener unos servidores para que los jugadores puedan jugar en línea sin problemas. Aunque haya juegos pensados para una experiencia multijugador local, la mayoría de títulos del actual mercado están enfocados al multijugador online, al igual que A Gummy’s Life; y mientras lo he jugado me ha recordado sobremanera al fallido juego LawBreakers de Cliff Bleszinski para PC y PS4, a pesar de tratarse de géneros totalmente distintos. Doy comienzo al análisis.

 

 

Bizcocho Borracho

A Gummy’s Life es un juego de lucha en el que varias gominolas se parten la cara a base de puñetazos, patadas, cabezazos y agarres. No tiene mucho más. Es un videojuego centrado en competir con todos tus amigos a la vez por ver quién sobrevive sobre el escenario. La premisa puede sonar parecida de entrada a la de un Super Smash Bros, pero aquí no encontramos nada parecido. A pesar de estar enfocado al multijugador competitivo A Gummy’s Life no presenta la complejidad que se requiere de un título de estas características. La comparativa con Super Smash Bros. no era una broma, mientras que en el crossover de Nintendo se ofrece una jugabilidad para que pueda jugarlo todo el mundo, en el juego que hoy nos concierne también se busca que toda la familia pueda jugarlo y divertirse dándose de tortas y demás golpes en el mundo virtual; sin embargo, A Gummy’s Life está libre de toda profundidad que presentan los juegos de Masahiro Sakurai.

 

En el combate de este goloso juego tenemos distintos comandos asignados cada uno a un botón distinto. Podemos dar puñetazos con la mano izquierda y con la mano derechas, dar pataditas que no alcanzan gran altura (pensad en un señor mayor jugando al fútbol), propinar cabezazos, agarrar a nuestros rivales y saltar. Todo es lo mismo con todos los personajes y tienen siempre los mismos efectos. No hay diferenciación entre personajes más allá del modelado de la gominola de turno. Comprendo que esta decisión sea para abrir el juego a todo el mundo pero el problema viene en que precisamente los controles sean los mismos para todos los personajes, por lo que se combate con todos de la misma forma. Esto unido a unos diseños «cuquis» pero en absoluto identificativos y diferenciadores hace que no sepamos a qué personaje estamos controlando en medio de un barullo que se pueda formar si todos los personajes se pelean en una zona muy reducida.

 

 

En busca de la variedad perdida

La variedad y la gracia del juego proviene de los escenarios. Es en ellos donde reside la mayor diversión del título, aunque no todos están igual de inspirados. Hay algunos niveles diseñados para ir eliminando zonas progresivamente. Otros pensados en tener que esquivar las trampas repartidas por ellos. Incluso tenemos escenarios que van rotando sobre sí mismos. Y no se juegan todos de la misma manera. Tenemos dos vías para ganar: o espachurramos a base de golpes a nuestros rivales, lo cuál se vuelve muy tedioso, o les lanzamos fuera del escenario. Lamentablemente tiramos más por la segunda opción porque queremos pasar cuanto antes al siguiente combate.

 

A nivel gráfico y sonoro se limita a cumplir sin más. No destaca en ningún aspecto en particular y las canciones son muy olvidables. No pasaría nada si jugásemos sin oír nada, de hecho, si jugáis con amigos esto es así. Sin embargo, el juego tiene un detalle feo, y es que nada más abrir el idioma seleccionado está en inglés por defecto a pesar de contar con los textos en español. Se puede cambiar desde las opciones pero sabiendo que la inmensa mayoría de los títulos salen en el idioma de la región de la consola queda mal que este juego no lo haga de entrada.

 

 

Quiero pero no puedo

A Gummy’s Life es como un osito de gominola, lo disfrutas mucho, pero si comes demasiados seguidos te acabas cansando (o coges un empacho), de ahí que suelan venir en paquetes pequeños, las gominolas claro. El problema con A Gummy’s Life es que se acaba volviendo repetitivo muy pronto, es aburrido jugarlo en solitario, pero es que incluso jugándolo con amigos te puedes llegar a cansar antes de lo habitual en un juego de peleas, independientemente del enfoque que tenga. Es un título sin apenas profundidad en la que la variedad la aporta el escenario donde juegues y no los personajes. Para rematar la faena tiene un enorme problema: ¿sabíais que este juego está en la eShop desde finales de octubre? ¿Habéis visto acaso algo de publicidad sobre este juego? Quizás a consecuencia de ello A Gummy’s Life tiene un multijugador online que ha pasado tan desapercibido que está vacío, y eso que cuenta con cross-play con la versión de PC. Es una verdadera pena que un juego con tan buenas ideas de base, pese a los fallos que arrastra, no haya tenido una oportunidad de demostrar lo que vale. Aún con sus múltiples fallos A Gummy’s Life es un juego que podría gustar a mucha gente, sin embargo, dichas personas no van a poder jugar de forma online a no ser que conozcan a más gente con el juego. En el siguiente vídeo podéis ver el gameplay que grabamos del juego en colaboración con mis compañeros alias79, Pichi y Synbioso. Podéis ver que si se le da una oportunidad puedes divertirte con el juego, aunque su mecha se agote pronto.

 

 

A Gummy’s Life – Una Vida Injusta

A Gummy’s Life es un buen juego. Con buenas ideas pero sin la adecuada implementación de las mismas y muy corto en cuanto a modos de juego. Aunque la diversión que ofrezca se agote pronto debido a la simpleza de su jugabilidad si tienes amigos con los que jugar siempre puedes desempolvar este juego para echarte unas partidas con ellos y pasar un rato agradable. No es justo que el futuro de un juego lo dictamine el marketing (o la falta del mismo) que haya podido tener, que no se le juzgue según todo el contenido y la diversión que puede ofrecer. Sin embargo, la vida no es justa siempre. En muchos casos la vida no es dulce, y A Gummy’s Life puede no ser del gusto de todos. Por muy azucarado que sea su envoltorio, su interior es más agrio de los que se podía esperar.

 

A Gummy's Life

Este análisis ha sido realizado gracias a un código de descarga de A Gummy’s Life proporcionado por Nintendo España

A Gummy's Life
¿Quién le ha dado un bocado a mi chuche?
A Gummy's Life es un juego de lucha que agota su fórmula demasiado pronto y que no cuenta con jugadores en línea para jugar online. Sin embargo, a pesar de sus limitaciones puede hacernos pasar una buena tarde en compañía de nuestros amigos y de unos cuántos aperitivos. Salados o dulces, he ahí tu elección.
Pros
Fácil de jugar
Divertido de ver
Contras
Prácticamente sin online
Pocos modos de juego
Se vuelve repetitivo muy pronto
62