Va de verde, consigue llaves, y tiene un acompañante algo cansino que en ocasiones le ayuda en su aventura. No, no estamos hablando de Link. Él ya tuvo su momento de gloria el pasado mes de septiembre con el lanzamiento de The Legend of Zelda Link’s Awakening. Este mes, en el que tiene lugar la festividad de Halloween, le toca el turno a la IP de Nintendo más terrorífica, y cuya última entrega hará su salida justo el mismo día en el que tiene lugar la «Noche de Brujas». Nos referimos, por supuesto, a Luigi’s Mansion 3, el título desarrollado por Next Level Games y publicado por Nintendo, que verá la luz el próximo 31 de octubre.
En NextN, ya hemos tenido el privilegio de acompañar al fontanero en los primeros compases del juego. ¿Pero en qué lío te has metido esta vez, Luigi?
Vacaciones arruinadas
El juego comienza con un tranquilo paseo en autobús. En el interior del vehículo, todo son caras conocidas. Hay tres pequeños y graciosos Toads, la dulce Peach, Mario, Luigi, y el fantasmagórico y fiel amigo de nuestro protagonista, el Ectochucho. El autobús llega a su destino. Un suntuoso, soleado y alto hotel, que se presenta, para Luigi, como la promesa de unas vacaciones de ensueño junto a sus amigos… o eso es lo que él cree. Hay algo raro en este hotel, especialmente en el personal que trabaja allí. Pero, ¡eh!, ¿quién dice que no a unas vacaciones en un hotel de lujo? Tras alguna que otra incómoda conversación con los miembros del staff, Luigi se dirige a su habitación a dar una cabezadita. Cuando se despierta, algo va mal. Ya no hay rastro de ese entorno acogedor y soleado. Ahora todo son sombras, oscuridad y sensación de amenaza. Además, no parece que haya nadie más, ¿dónde están sus amigos? No nos vamos a extender aquí, pero digamos que sus aventuras pasadas han venido a vengarse del pobre Luigi.
Una vez más, solo y a oscuras, Luigi se dispone a afrontar el reto. Por suerte, tenemos a mano la linterna, nuestra mejor herramienta contra la oscuridad y lo que en ella se esconde. Avanzamos poco a poco, nos encontramos con viejos conocidos, unos para bien, otros para mal y, en resumidas cuentas, si queremos rescatar a nuestros amigos, vamos a tener que recuperar todos los botones del ascensor del hotel y así llegar a todas sus plantas.
Nos ha parecido un planteamiento inicial bastante acertado. Son, por lo general, personajes conocidos (tanto los buenos como los malos), que se encuentran inmersos en un ambiente que contiene elementos identificables de la saga. Sin florituras y sin extenderse demasiado con introducciones innecesarias. Total, ya sabemos a lo que venimos, ¿no es así?
Empezamos con fuerza y… ¿moco?
Enseguida nos hacemos con nuestro «arsenal básico»: la Succionaentes, que esta vez recibe el nombre de GOM-1L, y la linterna, con la estrobombilla y el desoscurizador. Y, la verdad, esto nos ha chocado un poco. En la última entrega de la saga, Luigi’s Mansion 2, no era hasta que avanzaba más en la trama que te hacías con todas las herramientas que ahora, en esta tercera entrega, adquieres prácticamente al principio del título. Y esto, sinceramente, nos ha causado muy buena impresión. Significa que el juego está diciendo de entrada que no se va a quedar en lo que ofreció la última vez, sino que viene dispuesto a innovar. Y qué rápido lo hace. Enseguida nos encontramos con tres mecánicas nuevas e interesantes: el salto, que es más de lo que parece; el desatascador o Chupoun, que nos permite interaccionar con objetos a distancia; y, por supuesto, Gomiluigi. Este último es el que más llama la atención y el que más juego da. Se trata de un compañero viscoso del que disponemos a voluntad y que, además de poder usar el equipo y habilidades de Luigi, es capaz de utilizar su «viscosidad» en su favor y colarse por sitios en los que el fontanero no podría meterse. Eso sí, ¡no podemos dejar que se moje!
Gomiluigi nos ha parecido un gran acierto. Además de gracioso, da mucho juego. El poder alternar entre uno y otro para superar retos y combates está resultando ciertamente entretenido.
El entorno sigue siendo clave
En lo que respecta al apartado gráfico, el título aprovecha al máximo lo que Nintendo Switch puede ofrecer en cualquiera de sus modos. Luigi’s Mansion 3 es un juego que se ve muy bien, tanto sus cinemáticas como durante el propio gameplay, un detalle importante teniendo en cuenta que la mejora gráfica no afecta a la jugabilidad, que fluye sin pausas. Aspecto primordial en un título como éste, cuyo planteamiento se sustenta en unos escenarios muy detallados y que permiten un alto grado de interacción, al mismo tiempo que te exponen a una amenaza constante que obliga a la reacción.
Cualquiera que se adentre en este juego debe tener esto muy claro: la saga «Mansion» presenta siempre unos escenarios muy trabajados y repletos de objetos y secretos. Esta tercera entrega no es diferente, por lo que hay que buscar en cada recoveco de cada nivel. Por suerte, nosotros lo sabíamos, así que ya desde el principio hemos aspirado, iluminado, golpeado y levantado todo aquello que se nos ha presentado. Eso sí, mientras explorábamos el entorno al máximo, nos hemos mantenido alerta. Al fin y al cabo, este juego va de sustos, ¿no? Hay que explorar cada rincón, sí, pero cuidado con que, a lo mejor, en lugar de unas monedas, te encuentres con una rata, un murciélago, o lo que es más probable, un fantasma. Cada vez que se abre una puerta, se oye un sonido o se percibe movimiento en la distancia, nos preguntamos «¿qué va a pasar ahora?». Luigi’s Mansion 3 no se ha olvidado de uno de sus elementos característicos. Su entorno es una mezcla de estímulo y amenaza en la que todo te invita a actuar o a reaccionar.
Luigi’s Mansion 3 – Un nuevo conocido
Las primeras sensaciones que nos deja Luigi’s Mansion 3 son las de estar jugando a un título que conocemos pero que viene dispuesto a dar más que la última vez. Nos ha puesto en las manos todo aquello que ya esperábamos y, justo después, nos ha dado más, lo nuevo, lo que el título va a ofrecer en esta aventura. Hemos notado enseguida los efectos que tiene sobre la jugabilidad la unión entre las viejas y las nuevas mecánicas, que se complementan a la perfección, y cuya consecuencia es un grado mayor de variedad y complejidad. Los puzles y enfrentamientos nos están pareciendo más completos, pues ahora tenemos más respuesta que ofrecer como jugadores, lo que al mismo tiempo permite al juego plantear un desafío mayor. Y todo ello en un contexto que mezcla la interacción con el entorno con una amenaza permanente. Luigi’s Mansion 3 nos obliga a estar en alerta constante, expectante ante cualquier estímulo, sea éste bueno o malo.
Todavía es difícil asegurar nada, pero es posible que estemos ante la mejor y más completa entrega de la saga hasta la fecha. Para descubrirlo, lo mejor es que sigamos explorando las plantas del hotel. Ya os contaremos qué tal nos ha ido.
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