Impresiones – DOOM (Nintendo Switch). Llévate el gore donde quieras

Muchos nos quedamos babeando el año pasado cuando vimos como DOOM, haciendo honor a su narrativa, resurgía desde los mismísimos infiernos para traernos 23 años después otro festival de fuego, balas, sangre y vísceras.

 

Pensamos entonces, los usuarios de Nintendo, que no llegaríamos ni a olerlo. Sin embargo el pasado 14 de Septiembre, con nuestra querida Nintendo Switch bajo el brazo y Super Mario Odissey en el punto de mira, Bethesda nos dio unas agradable sorpresa cuando anunció la llegada de DOOM y Skyrim a la consola híbrida de los de Kyoto.

 

 

Hay que remontarse hasta el primer DOOM, aquel juego surgido de la cabeza John Romero en 1993, para encontrarnos con una de sus versiones corriendo sobre una portátil de Nintendo, concretamente “unos añitos más adelante”, en 2001, cuando a GameBoy Advance llegó un port del aclamado y controvertido juego de id Software.

 

-¡¿Pero qué **** es esto?!

¡Basta de lecciones de historia, ***** vejestorio decrépito! ¡Estamos aquí por DOOM, maldita sea, pon el heavy metal a todo volumen y vamos a desmembrar ***** demonios!

-Vale, vale… de acuerdo… pero creo que no era necesario partir la pizarra de un cabezazo ni prenderle fuego a las cortinas… en fin…

 

Del 5 al 8 de octubre tuvo lugar en la ciudad condal la Barcelona Games World, y hasta allí nos desplazamos para traer de primera mano todas las novedades de Nintendo. Entre otros juegos, pudimos probar DOOM en su modo portátil, jugando tanto con los Joy-Con como con el Mando Pro de Nintendo Switch, y a continuación os exponemos nuestras impresiones.

 

DOOM sigue siendo DOOM

La comida de mamá sigue sabiendo igual. Tranquilos, me explico. Aquellos «temerosos de dios» que esperaban una rebaja escandalosa en las prestaciones del juego para poder adaptarlo al hardware de Nintendo Switch pueden estar tranquilos.

 

Si bien es cierto que solo hemos probado el juego en modo portátil (y que las diferencias pueden ser más notables en el modo TV), no hay considerables diferencias con las versiones de PS4 y Xbox One.

 

 

Es evidente que esta versión es distinta, pero al fin y a la postre, el hecho de que se muestre a 720p y 30fps (por suerte muy estables) no cambia la sensación de fluidez y ritmo vertiginoso que se le exige a un juego de estas características. Es por ello que ver sus rápidas, sangrientas e impresionantes escenas entre nuestras manos es una experiencia única hasta ahora en una portátil.

 

¿A comisión con los oculistas?

Por otro lado debemos apuntillar que a la hora de jugarlo en modo “Table-top” (mirando a la pantalla de Switch pero con el mando por separado) algunos iconos de la pantalla, textos (por pocos que sean) u opciones de menú, se ven algo pequeños; algo que se repite en algunos de los juegos que llegan a Nintendo Switch cuando no pasan enteramente por las manos de los chicos de Kimishima. Sin embargo no es un problema que no sea fácilmente pulible antes del lanzamiento o con una actualización.

 

Mancharse las manos de sangre. Pero, ¿cómo?

Por último hablemos del manejo, y es que como dicen algunos «cuñados» “puretas” en esto del machacar botones: “Como los mandos de toda la vida no hay nada”.

 

El esquema de botones es sencillo, el usual en este tipo de juegos, y no toma mucho tiempo el aprenderlo. Sin embargo, a la hora de jugar a DOOM en modo “tabletop” nos hemos encontrado con que la mejor manera de disfrutar el juego es con el mando pro, dado que los joycons (aunque muy cómodos para jugar espatarrado en el sofá) hacen algo incómodo el dirigir con fluidez la cámara, y por tanto la mirilla, de nuestro marine. Además, a la hora de hacer un ataque “cuerpo a cuerpo” deberemos pulsar el stick analógico y se hace algo dificultoso colocar correctamente los dedos sin necesidad de readaptar la mano de nuevo para seguir jugando de forma agradable.

 

DOOM Nintendo Switch

 

DOOM – Este es el camino

Como conclusión, decir que DOOM ha sido una agradable sorpresa en el catálogo de la consola híbrida de Nintendo y que, jugándolo, nos hemos dado cuenta de que es perfectamente factible llevar la experiencia de un peso pesado de PC, PS4 o Xbox One a una consola como Nintendo Switch. Aunque con limitaciones técnicas sobre el papel, tiene mucho que decir y aportar a esas third partys que aún dudan de ella.

 

Si DOOM nació como el videojuego gamberro, del metal, del gore y de las carnicerías satánicas; qué mejor homenaje que poder jugarlo en una portátil y asustar a las viejas que te miren por el rabillo del ojo en el bus, en el metro o incluso en misa (por el amor de Iwata, si lo hacéis mandad pruebas gráficas).

 

Los gamberros no se quedan en casa, DOOM tampoco.